Al igual que los cronuts de los que os hablábamos ayer, esta nueva tendencia llega directamente de Estados Unidos y (de momento de forma discreta) está empezando a cruzar el charco. Imaginad un «barco cargado de…» cronuts y tarros de conserva convertidos en recipientes para beber, navegando hacia el Viejo Continente buscando hacerse un hueco en nuestras costumbres.
Así que, para quienes no queráis esperar a que la moda se extienda para estar a la última, os explicamos una posible manera para fabricar vuestra propia drinking jar.
En primer lugar necesitaríais unos tarros especiales de conserva en los que la tapa se compone de dos piezas, una plana que hace vacío y el aro con rosca.
Luego necesitaréis comprar una especie de adaptador llamado Cuppow, que convierte el tarro en un vaso para beber, retirando la parte plana de la tapa y sustituyéndola por este accesorio, tal y como se muestra en el siguiente video promocional:
Y ya estáis listos para lucir lo último en tendencias gastronómicas!